Esto representa una oportunidad para los consumidores ya que estas inversiones permitirán reducir los costes energéticos reduciendo los gastos de las castigadas economías familiares. A la vez esto ayuda a mejorar la cuenta de resultados de empresas, comercios y todos los sectores económicos.

Además, ofrece a los profesionales del sector de la energía y en especial para aquellas actividades vinculadas con la electricidad y las telecomunicaciones dar un paso más en la hoja de ruta de un futuro más eléctrico, digital y sostenible ya que creará miles de puestos de trabajo en los próximos años. En definitiva, esto supone una oportunidad única para abordar las inversiones que inexorablemente deben realizarse.

Desde el gobierno español se han puesto en marcha los planes de ayudas PREE y MOVES que ayudarán a acometer estas inversiones y que, en este momento se están ya desplegando en la mayoría de las Comunidades Autónomas, a los que se les suma la línea de ayudas de impulso a la eficiencia energética en las empresas de ámbito industrial que favorece la necesaria reindustrialización de nuestro país, elevando la productividad y competitividad de nuestra industria en un mercado global.